La vigencia de Los Beatles está fuera de toda
discusión. La banda de John Lennon, Paul McCartney, George Harrison y Ringo
Starr es, a casi 25 años de su disolución, la principal influencia para muchas
de las que están hoy en actividad. La música popular le debe a
la dupla Lennon- McCartney y a los momentos inspirados de George Harrison
muchas de sus mejores canciones. En 1966 Los Beatles dejaron de hacer recitales.
Por ello nunca tocaron en vivo el material de su etapa más creativa, el periodo
1966-1969. El 9, el 11 y el 12 de diciembre, Paul McCartney cantará muchos de
esos temas en el estadio de River, a 13 años del asesinato de John Lennon (8
de diciembre de 1980) y a 25 años del histórico Álbum blanco, al cual se
refiere este capítulo de Las vidas de John
Lennon, el polémico libro de Albert Goldman.
En la era de las peregrinaciones en jet, Los Beatles volaron
desdeInglaterra a la India en febrero de 1968 para reunirse con el Maharishi en
su ashram. Ya en Nueva Delhi siguieron viaje en jeep, recorriendo ciento
cuarenta millas hasta Rishikesh. La ciudad santa sobre el Ganges que se alzaba
al pie del Himalaya, coronado de nieve. “Estaba atestado de sadus (sic) con
indumentaria azafranada y discípulos con dhotis blancos, ermitaños desnudos
embadurnados de barro, mujeres indias con los ojos maquillados y las palmas
de las manos frotadas con alheña”, informaba Evelyn Ross, del Guardian. Pero
Los BeaÜes no vieron prácticamente nada de la India auténtica. Cabalgando por
último sobre asnos, pasaron sin detenerse por la ciudad de olor acre hasta
llegar a la abrupta garganta, que cruzaron a pie por un moderno puente
colgante que les condujo hasta las puertas de madera de la Academia de la
Meditación. Allí se encontraron, no con el cobertizo primitivo de ramas y
hojas que ordena la tradición hindú, o el alojamiento gratis que es deber del
santón facilitar sino un hotel de vacaciones al estilo occidental con una
tarifa de trescientos cincuenta dólares diarios, donde a cada beatle se le
asignó un chalet con agua corriente, caliente y fría, una cama con dosel y
calentadores eléctricos. Ringo hizo notar: “Era algo así como un campamento
Butlins Holiday”.
A aquellos peregrinos que consideraban con seriedad su vida
espiritual les despertaron bruscamente a las tres de la madrugada con fuertes
golpes en la puerta. Una vez se hubieron remojado la cabezay los ojos con
aguafríadel río sagrado, se reunieron en un salón alumbrado con luz tenue y que
olía a incienso, donde meditaron dos o tres horas antes del amanecer,
concluyendo sus ejercicios con salmodias y yoga corporal. Después de un
frugal desayuno vegetariano, se dirigieron a una red de pequeñas cuevas
perforadas debajo del templo para proseguir con su meditación en privado hasta
la comida del mediodía. Una dosis de trabajo duro en una lavandería humeante y
calurosa o en unos servicios públicos fríos y húmedos constituían por la
tarde el contrapunto a la espiritualidad de la mañana. .
¿A quiénes encontraron Los Beatles en el ashrarríl La
clientela de aquellos establecimientos lo constituía en su mayor parte viudas
o divorciadas acaudaladas. En la academia se encontraban setenta occidentales,
en su mayoría ancianas ricas de Suecia, porque el Maharishi tenía un centro en
Mal- mO, así como algunas bonitas jóvenes de California v varios astros pop.
Donovan, Mike Love de Los Beach Boys, que posteriormente realizó giras con el
Maharishi, y Mia Farrow, que se encontraba recuperándose de su matrimonio
relámpago con Frank Sinatra. Todos ellos iban vestidos a la usanza india,
saris y pijamas, túnicas kur- ta y sandalias, con tal número de abalorios y
campanillas que al andar todos tintineaban.
A John le encantaba la Academia de la Meditación porque en
ella podía disfrutar de todas las cosas que anhelaba, intimidad, protección,
ausencia absoluta de exigencias y un ambiente muy estimulante para una mente
dada a la divagación. Insistió en vivir separadamente de Cynthia, ocupando un
bungalow de piedra de una sola habitación, con una vieja alfombra en la que se
sentaba durante horas cada día, al parecer meditando pero en realidad
componiendo canciones. “Algo que iba zumbando en la cabeza —recordaría—, e
iban saliendo esas canciones. Para crear, aquello era sensacional.
¡Sencillamente brotaban!” Resulta irónico que las canciones creadas en aquel
clima espiritual y sereno fueran, en su mayoría, reflejo de la vida neurótica
y decadente que John había estado llevando hasta su llegada a la India. Y m So
Tired refleja el agotamiento insomne que le produjo el consumo noche tras
noche del ácido. YerBlues describe una depresión suicida. Happiness Is a Warm
Gun contiene una repetida referencia a su ansia ardiente de una dosis. John
había llevado a Rishikesh su cabeza londinense.
Durante toda la estancia de Los Beatles en la Academia de la
Meditación, la prensa británica mantenía bajo observación el ashram y
archivaba informes que aparecían en las revistas del ramo y en la prensa
nacional. Los reporteros musicales cuyo trabajo dependía de promocionar a Los
Beatles, se mostraban apropiadamente respetuosos, pero la prensa en general
ridiculizaba como una engañifa cuanto acontecía en el campamento y se
esforzaba por demostrar que el Maharishi era un estafador. Los Beatles salían
en de¬fensa de su santón, observando a John, entre otras cosas: “Tuvieron que
matar a Cristo antes de que comprendieran que era Jesucris¬to”. (...) Una vez
hubo captado a Los Beatles, el gurú empezó a hablar de una red a escala mundial
de centros de meditación capaces para recibir a millones de perso¬nas. Cuando
se le insistía sobre sus ambiciones comerciales, el taimado gurú solía explicar
que en esos momentos tenía que mante¬nerse activo porque pronto se reti¬raría
en su “silencio absoluto”.
Al final, el idilio indio se des¬embrolló rápidamente. En
pri¬mer lugar Paul y Jane abandona¬ron, revelándose absolutamente libres de
todo compromiso con el Maharishi. Luego John envió a buscar a su gran amigo
Alex Mardas, un joven griego que ha¬bía cautivado al crédulo John presentándose
como un genio de la electrónica que sólo necesitaba una pequeña financiación
para producir una serie de inventos que revolucionarían la vida y la carrera de
Los Beatles.
Magic Alex era el hombre adecuado para desenmascarar al
Maharishi. Tenía grandes conocimientos sobre el trabajo policial al ser su
padre comandante de la policía secreta griega. Una sola ojeada al Maharishi y
se despertaron sus sospechas. Alex descubrió pronto que el viejo estaba muy
ocupado seduciendo a una de aquellas bonitas jóvenes de California. Al negarse
John y George a dar crédito a tan escandalosa acusación, Alex preparó una
trampa para su hombre.
La siguiente ocasión en la que el monje se encontró solo con
su discípula, Alex hizo un ruido fuera del bungalow. Observó en el Maharishi
un estremecimiento culpable, que se dedicó de inmediato a alisarse los
ropajes, enviando seguidamente ala joven a su residencia. Aquella noche Alex y
la joven estuvieron sentados hasta bien avanzada la noche con John y George
repasando las experiencias de ella con su director espiritual. George
reaccionó indignado, negándose a creer que su maestro hubiera sido
sorprendido con el dhoti levantado. Pero John se dio cuenta rápidamente de que
le habían engañado.
Al término de la conferencia nocturna quedó convenido que
Los Beatles se irían a la mañana siguiente. Se encargó a Alex que se ocupara
del transporte y se dijo a las mujeres que llevaran únicamente lo necesario.
Previendo serias dificultadescon su santón, Los Beatles planeaban cortar por
lo sano. John recordaba que a la mañana siguiente “todo el grupo nos lanzamos
a la carga hacia la cabaña. Como de costumbre, yo era el portavoz, así que
dije: ‘Nos vamos’. Me preguntó por qué, y yo dije‘Bien, eres tan cósmico que
conocerás el poiqué’. El Maharishi me lanzó una mirada que parecía decir ‘Te
mataré, hijo de puta’.”
A su regreso a Inglaterra, John Lennon declaró: “Nos
equivocamos. ¿Puede haber algo más sencillo?” A decir verdad, para John fue
beneficioso el descubrimiento de que el Maharishi era un hombre con deseos
camales, ya que era demasiado propenso a creer en los hombres milagros. Lo malo
fue su actitud frentea aquellarevelación. En lugar de indagar sobre los
motivos reales de su felicidad bajo TM, John le dio la espalda al experimento
en su totalidad, lo que fue una verdadera lástima, ya que el Maharishi había
obrado maravillas con John Lennon. Por primera y única vez en su vida de
adulto John había logrado liberarse del alcohol y de las drogas. Había gozado
con la rara experiencia de una exaltación continuada. En sólo dos meses él y
los otros beatles habían escrito treinta canciones, prácticamente lo más
importante del Álbum blanco.
LA MAGA,
Miércoles 1 - De Diciembre de 1993
Albert Goldman
Albert Goldman
The Beatles - 22 de Noviembre de 1968
(tambien conocido como The White Album)
CD 1
01 - Back in the U.S.S.R. (2:43)
02 - Dear Prudence (3:55)
03 - Glass Onion (2:17)
04 - Ob-La-Di, Ob-La-Da (3:09)
05 - Wild Honey Pie (0:53)
06 - The Continuing Story of Bungalow Bill (3:14)
07 - While My Guitar Gently Weeps (4:45)
08 - Happiness Is a Warm Gun (2:44)
09 - Martha My Dear (2:28)
10 - I'm So Tired (2:03)
11 - Blackbird (2:18)
12 - Piggies (2:04)
13 - Rocky Raccoon (3:33)
14 - Don't Pass Me By (3:50)
15 - Why Don't We Do It in the Road? (1:41)
16 - I Will (1:45)
17 - Julia (2:56)
CD2
01 - Birthday (2:43)
02 - Yer Blues (4:00)
03 - Mother Nature's Son (2:48)
04 - Everybody's Got Something to Hide Except Me and My Monkey (2:24)
05 - Sexy Sadie (3:15)
06 - Helter Skelter (4:29)
07 - Long, Long, Long (3:06)
08 - Revolution 1 (4:15)
09 - Honey Pie (2:41)
10 - Savoy Truffle (2:54)
11 - Cry Baby Cry (3:02)
12 - Revolution 9 (8:22)
13 - Good Night (3:13)